¡Solo lo que se cultiva también puede desarrollarse!
by Kerstin Wartberg
En 1980, después de completar mi licenciatura en el conservatorio de música de Colonia, Alemania, tuve la oportunidad de estudiar durante casi dos años con el Dr. Suzuki en el Talent Education Institute en Matsumoto, Japón.
Debido a que el Dr. Suzuki no usó ningún material didáctico escrito en sus lecciones, convertí en un hábito, desde el principio, tomar notas extensas. También tuve numerosas oportunidades para hacerle preguntas específicas, lo que me permitió ampliar y modificar estas notas aún más.
Tengo muy buenos recuerdos del estilo de enseñanza relajado y personal del Dr. Suzuki. Entre las actividades de la lección
Normalmente se sentaba con nosotros, los profesores en formación, bebía té y discutía temas que eran especialmente importantes para él. Estos pensamientos a menudo resurgían, como en estos extractos de un discurso a los padres en la escuela de verano de Matsumoto en agosto de 1982.
Cito de mis notas:
1. La importancia de la práctica diaria
Estimados padres, algunos de ustedes ciertamente han tenido una experiencia similar con respecto a la práctica con su hijo: “Estuvimos tan ocupados los últimos días que no tuvimos tiempo para practicar. Hoy recuperaremos los tres días perdidos y practicaremos tres veces más “. With two examples from other life experiences we can recognize that this conclusion is flawed.
Ejemplo 1: Imagine que ha olvidado darle medicamentos a su hijo durante dos días. Tu decides darle al siguiente día los medicamentos de tres días en una sola toma.
Ejemplo 2: Riegas una planta que ya tiene hojas secas con abundante agua tratando de recuperar los tres días que no la regaste, ¿De verdad crees que mañana tendrá hojas verdes?
Las experiencias de vida de muchas generaciones nos enseñan que los procesos de desarrollo y las fases de crecimiento no pueden pasarse por alto.
Las conclusiones que se pueden extraer de estos pequeños ejemplos hablan por sí solas y deberían sea claro para todos:
La legitimidad de las leyes naturales es igualmente válida en la crianza de los hijos,
su desarrollo y su estímulo.
2. La revisión periódica de piezas aprendidas previamente
Queridos padres, existe una buena forma de practicar en casa mediante la cual surgen rápidos progresos y confianza, y también hay una mala manera que resulta en un progreso lento emparejado con una sensación de inseguridad.
En ambos casos los padres y los estudiantes se esfuerzan mucho, pero los resultados son muy, muy diferentes. Sé que muchos padres y estudiantes conocen el método correcto para practicar, pero no logran seguirlo en consecuencia. Todos los niños han aprendido a hablar con este método, y todos los niños han alcanzado un nivel notablemente alto de habla. El método de aprender a hablar debe aplicarse simplemente a la práctica diaria, lo que significa que el alumno escucha con regularidad las piezas que ha aprendido o que aprenderá en el futuro. Cuando el niño ha aprendido la primera pieza, debería tocar esta pieza varias veces al día.
Cuando se ha aprendido la segunda pieza, el alumno debe tocar la primera y la segunda pieza varias veces cada día. Para la tercera pieza se aplica la misma regla: El alumno practica diariamente la primera, segunda y tercera pieza, etc.
Un plan formal de revisión es necesario solo cuando el estudiante ha alcanzado una etapa avanzada, momento en el cual el repertorio es demasiado extenso.
Este método de práctica es simple y natural y sin duda tendrá éxito. Sin embargo, muchos padres y estudiantes eligen el camino enérgico y falso: el estudiante practica solo la nueva pieza para aprender. Las piezas aprendidas anteriormente rara vez o nunca se revisan.
Consideremos esta trampa y transfiramos el método de mala práctica al aprendizaje del habla: un niño aprende la primera palabra. Después de esto, se enseña la segunda palabra y luego la tercera, etc. Por lo tanto, solo una nueva palabra es enseñada al niño, y las palabras aprendidas previamente no se revisan ni se escuchan. A pesar del gran esfuerzo, este método de práctica da como resultado una facilidad del habla notablemente baja. Se desarrollaría un habla fluida y sin esfuerzo sólo en unos pocos niños extraordinariamente dotados. Desafortunadamente, en la educación tradicional (musical), esta es a menudo la
camino elegido.
Después de muchas búsquedas y de mi larga experiencia, estoy convencido de que el método que sigue el ejemplo de aprender la lengua materna es el método correcto, natural y más eficaz.
3. La importancia de la escucha musical para el desarrollo musical
Estoy absolutamente convencido de que todo niño puede alcanzar un amor natural por la música. Si sensibilizamos a nuestros hijos a la música, también serán más receptivos en otras áreas. Ayudar a una persona a alcanzar una conciencia perceptual refinada es una fuente invaluable de felicidad para el resto de la vida del niño y de los padres. ¿Quién podría impartir este valor inconmensurable excepto los propios padres del niño?
Si reproducimos grabaciones con las piezas didácticas así como otras obras de alta calidad musical para nuestros hijos todos los días, esto ciertamente no estará exento de consecuencias. Los niños desarrollarán gradualmente un vínculo interno con las piezas, así como una sensibilidad musical que se puede afinar y profundizar.
Los padres deben asumir la responsabilidad de la escucha diaria de piezas musicales seleccionadas; Esto es exclusivamente una cuestión de vigilancia de los padres.
Sin embargo, esto es claramente más fácil de decir que de hacer. ¿Por qué? ¿Quizás debido a una convicción inadecuada de los padres? Algunas personas simplemente no pueden aceptar el hecho de que es en gran parte su responsabilidad despertar y desarrollar un oído músical en sus hijos. Al parecer, son de la opinión reflejada en este y otros comentarios similares: “¿Reproducir la grabación todos los días? Algo como esto no puede cambiar lo innato. ¡No está en nuestro poder!”
Esto contradice el hecho de que los niños, cuyos padres reconocen la importancia de escuchar música, desarrollan una relación con la música. La búsqueda intransigente de este objetivo y la formación deliberada del entorno de un niño es un regalo especial e invaluable de los padres a sus hijos. También es válido para criar hijos: ¡Sólo lo que se cultiva también puede desarrollarse!